Las estaciones de servicio de todas las marcas retocaron sus pizarras, aunque en porcentajes variables. Las de la marca angloholandesa aplicaron el incremento más notable.
Septiembre llegó con la crónica de un aumento anunciado. Como viene ocurriendo con escalofriante asiduidad, el previo de los combustibles volvió a subir, en porcentajes variables, concretando un nuevo golpe a los vapuleados bolsillos de los conductores de la provincia y la región, que se consolidan en el tope del ránking nacional cuando se observa lo que cuesta llenar un tanque.
La razón del aumento se debe al reacomodamiento trimestral de los impuestos a los combustibles que define la Nación. Son dos, en montos fijos, no porcentuales. Uno de esos impuestos internos es el ITC, o impuesto a la transferencia de combustible, y otro es el IDC, o impuesto al dióxido de carbono.
Lo llamativo es que si bien la petrolera YPF cumplió con lo anunciado, aplicando un retoque de entre el 1,5 y el 2,5% a todos sus productos; la angloholandesa Shell se despachó con una suba de cerca del 12%, “primereando” a sus competidoras con el argumento de la reciente corrida cambiaria que elevó considerablemente el precio del dólar.
NORTE CHACO
Sabado, 01 de septiembrede 2018