La Escuela Nº 618  "Raquel Cristina Brusco de Benítez" es una de las escuelas  más antiguas que tiene la ciudad de Saladas, la misma cumplió 100 años de labor educativa el pasado 05 de junio de 2019, por tal motivo el  viernes  25 de octubre,  con un acto conmemorativo  festejará  su aniversario cien.

La Escuela Nº 618  ”Raquel Cristina Brusco de Benítez”, que como Escuela Nacional Nº 218, inició su labor educativa  el 5 de junio de 1919, se halla ubicada sobre el otrora  "Camino Real", en pleno corazón del paraje "La Loma"  o "Las Lomas", 1ª Sección del Departamento de Saladas (Jurisdicción del Municipio de Saladas).

ESCUELA Nº 533 DE PAGO PIRÚ

La invitada, Escuela Nº 533 "San José" (en principio Escuela Nacional Nº 133) de Pago Pirú, que también festeja su primer centenario, acompañará  y participará del evento, desde la Redacción de Mi Saladas, “creemos” que esta escuela es desconocida para la mayoría de los saladeños, por ello realizamos una investigación a efectos de  hacer conocer parte de nuestra historia.

La Ley 4874, conocida como Ley Láinez, por ser su autor el periodista y senador Manuel Láinez, sobrino del escritor Miguel Cané, fue sancionada el 17 de octubre de 1905, complementando la Ley 1420, sancionada en 1884, que regía en el ámbito de la Capital Federal y Territorios Nacionales, con el propósito de extender la educación pública, laica y gratuita a todo el territorio nacional, apostando a la educación como medio de progreso y pacificación social, en una Argentina donde existía mucho analfabetismo, descontento social, gran cantidad de inmigrantes e ideas socialistas y anarquistas que atentaban contra el orden conservador y liberal imperante. El objetivo era crear escuelas primarias y rurales en aquellas provincias que lo pidieran.

LA LEY LÁINEZ

El contexto histórico era violento. El movimiento obrero hacía sentir sus demandas contra las políticas liberales que beneficiaban a los grandes capitales y contra el fraude electoral, en este caso liderado por la Unión Cívica Radical. Esto es reprimido por el gobierno de Quintana, pero la tensión social crece, e incluso el presidente sufre un atentado fallido por parte de un militante anarquista.

Ante estos hechos, el liberal modernista Manuel Láinez intenta democratizar el sistema. Sostiene que el crecimiento del país y su orden dependen de la inversión educativa para lograr educar en la unión nacional, con identidad patriótica, para detener el movimiento socialista y anarquista a través de la alfabetización y no de la violencia. También se incluye la capacitación docente, todo con fondos nacionales.

La idea era establecer escuelas nacionales en territorios provinciales para alfabetizar masivamente e impedir la inmigración hacia la capital.
 
La ley pronto hizo sentir sus efectos. De 28.152 alumnos que se registraban en 1906, se pasó a contar con 325.000, treinta años más tarde. En 1906 se fundaron 438 escuelas Láinez, un 11 % del total de las escuelas. La población colaboró donando terrenos y levantando paredes. Hacia 1930 el 30 % de las escuelas estaban bajo la órbita nacional, mostrando mucha mayor calidad educativa que la que brindaban las escuelas provinciales.

La crítica a la ley se basó en atentar contra el federalismo provincial, desconociendo las particularidades de cada región, establecido por la Constitución Nacional.

A partir de la Revolución Libertadora de 1955, el gobierno militar, aceptando las propuestas del FMI y del Banco Mundial, retrae el rol del Estado en materia educativa para controlar los gastos públicos y comienza la transferencia de las escuelas nacionales al ámbito provincial.

ESCUELA Nº 533

En este marco, con la fundación de la  “Colonia Oficial Juan Bautista Cabral”, el 15 de octubre de 1919, se repartieron terrenos de 50 X 50 metros, para cada familia, reservándose  dos lotes de 15 hectáreas, para escuela de agronomía, policía, capilla, registro civil etc. La tierra dividida así fue transferida gratuitamente a agricultores, criollos puramente.

Para ello, con autorización del Congreso Nacional, se destinó una importante suma de dinero, para adquirir una fracción de campo  a la sucesión de Don Ruperto Insaurralde, encargando al gobierno provincial a materializar tan importante proyecto. En aquel entonces sus límites eran:  Al Norte Estancia a “La Bobril”. Al Sur, Sucesión Rinessi y Domingo Yaya. Al Oeste Ana Guerra de Acuña y Juan G. Noya. Al Este  Estero Camacho y Laguna Saladas.

“Afincada a la población favorecida, se hizo necesario la creación de una escuela. La creación de una escuela, que con audiencia del gobierno de la provincia, creo  la Inspección  Seccional, dependiente del Consejo Nacional de Educación, la primer Escuela Nacional Nº 133.

De acuerdo al censo de la época, la colonia contaba con 600 habitantes y 200 alumnos.
“Su primer Director fue  el Señor Eleuterio Sosa que fue exonerado, no encontrándose datos de fundación, solo el asiento de Inspección dejado por el Inspector de Zona, Sr. José M. Artigas  que está pendiente en el Libro de Inspectores de Zonas”.

“La Señorita Ofelia Portalea fue designada  Directora de la Escuela, cuyo nombramiento telegráfico, ocupo el puesto el 1 de octubre de 1919, fue después de 6 años de trabajo con tres grados, le nombraron primer maestro a la Sra. Berta Flores Pisarello de Gil, siguieron los nombramientos…” hasta aquí tenemos el documento  que nos permite conocer el inicio de  esta centenaria escuela situada en “Pago Pirú”. Hoy escuela Nº 533, luego de su traspaso a la jurisdicción de la provincia de Corrientes. Por la época en que  fueron creadas ambas escuelas, se desprende, lo hicieron bajo la ley Lainez, por esta circunstancia se los conocia a las escuelas de principio del siglo XX como "Escuelas Lainez".

En la actualidad, son Directoras de estas escuelas centenarias: Escuela Nº 618 "Raquel Cristina Brusco de Benítez" la Sra. Yolanda Riquelme  y de la Escuela Nº 533 la Sra. Lucia Barrios.
 

Investigación: Redacción Mi Saladas/ Jueves, 24 de octubre de 2019