He visto miles de fotografías del Museo Histórico Nacional “Juan Bautista Cabral”, en pocas y en segundo plano aparece el árbol de Alcanforero que se halla en el espacio parquizado de esta casa histórica. He visto miles de personas visitar el lugar. He visto cientos de actos allí, pero nunca he visualizado una mirada hacia el Alcanforero, una mirada que haga indagación del mismo para comprobar su realidad, sus circunstancias y su historia.

La historia contrafactual, llamada también historia alterna o historia virtual es el resultado de un ejercicio mental que responde a la pregunta ¿qué habría pasado si ...?.

Este árbol de Alcanforero que se yergue al costado del Museo Histórico Nacional “Juan Bautista Cabral”, más allá de ser un ejemplar nuevo, podría ser un retoño de esta especie plantado por la familia Casajus- Cabral, teniendo en cuenta que es un árbol exótico, característico de Asia, y que las familias adineradas de la época podían acceder a este tipo de plantas.

A finales de la década de 1970, este árbol fue trasplantado unos metros más al oeste, (En el lugar donde anteriormente existía una planta de Magnolia) ya que estaba ubicado en el lugar a construirse el edificio de la Biblioteca Popular Municipal “Gerardo Pisarello”.

No sería descabellado, pensar que este ejemplar que se caracteriza por sus propiedades medicinales, es un retoño de otro árbol, que sirviera para uso medicinal de la familia Casajus- Cabral, suponiendo  también que el héroe de San Lorenzo, Juan Bautista Cabral, en su niñez, pubertad y/o adolescencia, pudiere haber sido medicado con el ascendiente de este ejemplar de origen asiático.

Puede ser ficción, puede ser especulación, pero quien pudiere sostener lo contrario, también caería en la ficción o la especulación.

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Domingo, 14 de febrero de 2016