En el marco de la Distinción a la Mujer Saladeña, que se realiza cada 8 de marzo, si bien desconocemos a las demás nominadas e instituciones que las nominaron. Independientemente de esta circunstancia, hemos hallado en la cuenta de Facebook de  Milagros Ramírez, una publicación en la que describe una historia de vida, a través de una resumida  biografía de Doña Tomasa Molina de Acuña.

Quien redacta esta introducción, da fe de la realidad y veracidad de lo publicado en la biografía de Milagros Ramírez, por el solo y contundente  hecho de conocerla a Doña Tomasa como a haberlo conocido a su esposo Don Ramón Acuña, en lo que concierne a su vida y obra, muy acertada la decisión de  estar como una de las nominadas a ser acreedora de la “Distinción a la Mujer Saladeña”, a llevarse a cabo el próximo 8 de marzo en el complejo turístico municipal ”Presidente Kirchner”. Desde www.misaladas.com.ar le deseamos la mayor de las suertes, pero tomamos una frase de la publicación de Milagros Ramírez como nuestra, ya que formamos parte de quienes la conocemos: "...no importa si no ganas el martes..pero para nosotros y los que te conocen..ya sos una ganadora de la vida..."

A CONTINUACIÓN LA PUBLICACIÓN DE FACEBOOK:

“LAS COSAS SE HACEN EN VIDA, COMO DICE EL REFRÁN...por eso,abuela querida... tu familia y yo te armamos tu historia, la cual, gracias a personas muy buenas, llego al consejo municipal, con lo que decidieron que estés nominada entre las 10 mujeres del año...no importa si no ganas el martes..pero para nosotros y los que te conocen..ya sos una ganadora de la vida...a los que quieran estar, los esperamos el 8 de marzo para apoyarle a nuestra reliquia...

Esta es tu historia de vida:

Tomasa Molina de Acuña

Nacida el 7 de marzo de 1936, en Pago Alegre. Paso su adolescencia trabajando para ayudar a su madre y sus hermanos, sin tener la posibilidad de estudiar, a los 15 años fue al chaco en la cosecha de algodón y tres años después forma su hogar con Don Ramón Acuña, donde aparecen los frutos del amor, “sus hijos” estableciendo así su familia en saladas. Su casa era muy humilde y de bajos recursos, pero eso no le impidió que ella pudiera ayudar, recibir y hospedar a diferentes personas, había casos en que familias de otros lugares necesitaban lugar para quedarse por diferentes motivos, ella les dio comida, ropas, les ayudo con medicamentos, y demás necesidades. Luego de 8 años de establecerse en la cuidad, su marido se accidenta perdiendo una pierna, lo que impidió que el siguiera trabajando, fue allí donde doña Tomasa empieza la dura tarea de traer el pan a la casa, comenzando a trabajar de empleada y niñera en todo el barrio.

Unos años después logra entrar a trabajar en el hospital María Auxiliadora como personal de limpieza, pero también servia de ayudante a los médicos que atendían en los partos. Su bondad hacia los demás le permitió realizar varias tareas como bañar a los enfermos, cocinar a los médicos residentes, y cuidar a los internados.

En total tuvo 8 hijos biológicos, pero también su amor por los chicos la llevo a criar a más de 15 niños, (hoy ya todos ellos mayores) los educo como pudo y los ayudo con todo lo que estaba a su alcance.

Paso duras pruebas y transformo situaciones difíciles en hermosas victorias que hoy nos sirven de ejemplo, demostró que el amor a los hijos y las personas es una fuerza tan poderosa que no se puede comparar con nada. A pesar de ser analfabeta , su sencillez templanza y optimismo, son símbolo de lo que una madre y buena mujer es capaz de hacer, aún en las situaciones más adversas.

Luego de trabajar muchos años en el hospital, se jubila por una enfermedad en los pulmones, pero su caridad no termina con eso, ella desde su casa seguía asistiendo a los que mas necesitaban, nunca le negó un plato de comida a nadie y jamás descuido su papel de madre, para ella sus piedras preciosas (hijos) fueron siempre lo primero. Desde las actividades más simples hasta los momentos más cruciales, esta madre y amiga ha sido el respaldo de todos sus retoños.

Actualmente padece la enfermedad conocida como diabetes y también tiene una prótesis de cadera producto de la rotura de la misma por una caída, lo que le impide caminar correctamente, se maneja con su bastón o su andador, pero nunca pierde las ganas, todavía tiene fuerzas para cocinar con sus 80 años, y regalarnos las famosas “tortas fritas” únicas en su sabor, vive rodeada de sus hijos, nietos y bisnietos.

Es muy larga la lista de logros que realizo como mujer ayudando a los demás, pero los que en verdad la conocen, no se pueden olvidar de lo que ella les brindo. Trabajo incansablemente y para la gente del barrio, donde vive hace años, es además un ejemplo de solidaridad y alegría. Tiene muy buena relación con los jóvenes de la zona, ellos la respetan y la quieren mucho.

Para concluir, podemos contar una de las tantas anécdotas vividas junto a ella:

(Un familiar nos cuenta)

“El 18 de octubre estábamos festejando el día de la madre junto a la abuela, no faltaba nadie, estaban los hijos, nietos y bisnietos, era al medio día, justo terminábamos de almorzar cuando golpean la mano en el portón de la casa, un señor de unos 45 años pregunta si puede entrar a saludar a Doña Tomasa, lo hicimos entrar y el, en cuanto la ve, se larga a llorar abrazándola, nosotros no entendíamos nada, porque tal vez los más grandes si lo ubicaban, pero nosotros no. En un momento él le dice yo soy Noni vallejos, vos le cuidaste a mi mama cuando estuvo muy enferma, hasta lo último, le atendiste, “vos sos como mi mama”…el nos mira y nos dice ella es como mi madre, por eso la vine a saludar…ahí nos dimos cuenta el valor que ella tenía para nosotros y para los demás”

Tomasa Molina fue, es y será siempre una gran mujer, honesta, sencilla, sin maldad alguna, ayudo y sigue ayudando a quien necesita, si necesitas un techo ella te hace un lugar en su humilde casa, si necesitas comida, te da de su plato por más que ella se quede sin comer…ella es una luchadora incansable de la vida, ejemplo de humildad, de lucha, de valentía, esta mujer es un ejemplo a seguir….”

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Domingo, 06 de marzo de 2016