Solo hay una denuncia en la Policía radicada por una mujer a la que su hija, le relató que dos hombres circulando en un Fiat 147, de color blanco, supuestamente habrían intentado secuestrarla junto con una amiga, en pleno centro de esta ciudad.
Primero se debe tratar de corroborar la veracidad de los audios fotografías y comentarios que se difunden en las redes sociales sobre supuestos intentos de secuestros de niños, información que en su gran mayoría es falsa.
Solo hay una denuncia en la Policía radicada por una mujer a la que su hija, le relató que dos hombres circulando en un Fiat 147, de color blanco, supuestamente habrían intentado secuestrarla junto con una amiga, en pleno centro de esta ciudad.
A este caso de amplia difusión en Saladas, por ser personas conocidas y mediar denuncia policial ante la comisaria distrito Saladas, desato una oleada de versiones sobre otros creídos secuestros de niños generó una psicosis en nuestra ciudad.
Esta es una situación que se repite cada tanto con fines desconocidos. La proliferación en las redes sociales de mensajes y publicaciones de dudosa procedencia no hace más que aumentar la confusión y el temor, como ya ocurrió en innumerables oportunidades.
En los años 90 y en la década pasada eran las Trafics blancas y en las últimas dos semanas los utilitarios grises, tipo Kangoo o Partner y Fiat 147, supuestamente utilizadas para intentar secuestrar niños, algo que nunca ocurrió.
CORROBORAR LA VERACIDAD
Como consecuencia de la psicosis generada por la difusión de este presunto caso de secuestro en la ciudad de Saladas, que se replicó en localidades vecinas, hasta el punto de denunciarse en la redes de mensajería de Whatsapp y otras como un presunto hecho consumado en la cercana localidad de Tabay nunca confirmado oficialmente, pero si extraoficialmente fue desmentido, o sea de la misma forma que se generó.
Los usuarios de los distintos tipo de redes redes sociales, hasta una entidad empresarial hasta el momento considerada seria, los medios de prensa, formadores de opinión, deben llamarse a la prudencia y objetividad, que corresponde a la tan sensible tarea de informar con responsabilidad y profesionalismo.
Se debe tener prudencia a la hora de compartir información de la que no se conoce su veracidad. Antes de comunicarla como noticia o en las redes sociales, en especial en esta ciudad, donde todos nos conocemos, además todo vecino conoce a alguna autoridad, al recibir alguna información puede comunicarse y comprobar que sea real y así colaborar en la seguridad y armonía de toda una comunidad, con una difusión objetiva.
Sábado, 08 de abril de 2017